Argentina
Chile
Colombia
Costa Rica
Ecuador
El Salvador
México
Perú
La radiofísica es una rama de la física centrada en el estudio teórico y experimental de algunos tipos de radiación, así como su emisión, propagación e interacción con la materia.
En este sentido, si has estudiado Física u otras disciplinas científicas y tecnológicas, y te llama la atención, en concreto, la Física Médica, lo cierto es que puedes especializarte en alguna de sus áreas específicas y, de paso, trabajar en un hospital.
¿Cómo? A través del Radiofísico Interno Residente (RFIR). ¿No sabes lo que es? ¡No te preocupes! En el siguiente artículo te contamos todo lo que necesitas saber sobre él.
🏥 ¿En qué consiste el RFIR?
Las siglas RFIR hacen referencia a Radiofísico Interno Residente o Físico Interno Residente. Se trata de un sistema de formación desarrollado por el Ministerio de Sanidad que tiene el objetivo de crear especialistas en Radiofísica Hospitalaria.
El RFIR hace referente a tres cosas: un examen, un periodo de formación y la persona que realiza ese periodo de formación. Todas están relacionadas, ya que, para acceder al periodo de formación tienes que aprobar el examen de acceso, que se realiza anualmente.
Este periodo de formación postgrado forma parte de la Formación Sanitaria Especializada (FSE) y, como hemos dicho anteriormente, es el Ministerio de Sanidad el que lo desarrolla. De esta forma, el objetivo final es que adquieras la responsabilidad profesional que requiere esta especialidad.
✅ Presentación de solicitudes, examen y evaluación
Es a mediados de septiembre cuando el Ministerio de Sanidad el que convoca el examen a través de una convocatoria publicada en el BOE. En este documento se indica la fecha y hora del examen, las fechas para presentar solicitudes y los hospitales en los que se pueden realizar estas especialidades, entre otra información.
Además, con la publicación de esta convocatoria, también se abre el proceso para presentar las solicitudes.
Entre los documentos que hay que entregar se encuentra el título de licenciado o graduado en física o, en su defecto, el documento de haberlo solicitado. Sin este título, no se puede realizar el RFIR.
Asimismo, también deberán presentar el Modelo 790 de “Solicitud de admisión a pruebas selectivas de acceso a formación sanitaria especializada y liquidación de tasa de derechos de examen”. Un documento que se puede descargar gratuitamente en la página web del Ministerio de Sanidad. También se debe presentar una copia del DNI y del expediente académico universitario.
Una vez presentada toda la documentación y con la certeza de que han aceptado nuestra solicitud, llega el momento de prepararse para el examen.
Esta prueba-oposición se convoca anualmente y se realiza en todo el territorio español al mismo tiempo. Por lo general, suele realizarse el último sábado de enero o el primero de febrero, en torno a las cuatro de la tarde.
Su duración es de cuatro horas y consta de 175 preguntas, más 10 de reserva por si alguna de las principales estuviese mal formulada y tuviese que ser anulada. Asimismo, las preguntas son tipo test, con cuatro respuestas cada una, de las cuales solo una será correcta.
En cuanto a la puntuación, cada respuesta correcta puntuará un total de 3 puntos mientras que las que erróneas restaran 1 punto. Las que se dejen sin contestar, ni restan ni suman, es decir, directamente no puntúan.
Además, el 90% de la nota total corresponde al examen mientras que el 10% restante, al expediente académico.
Tras aprobar el examen, comenzarás un periodo formativo teórico y práctico de tres años interrumpidos y remunerados. En estos años, adquirirás las habilidades y capacidades necesarias para realizar las labores que engloba esta especialidad.
Además, estarás supervisado por otros profesionales, por lo que te podrán ayudar y aclarar tus dudas cuando lo necesites.
🦴 Funciones del Radiofísico Hospitalario
La Radiofísica Hospitalaria es la especialidad que se encarga de medir y valorar las radiaciones. Su objetivo es contribuir en la planificación, aplicación e investigación de las técnicas radiológicas.
Así, su campo de acción se centra en la asistencia médica especializada y su área de asistencia abarca desde el diagnóstico hasta la terapia por radiaciones, sea cual sea la fuente de radiación y el procedimiento utilizado.
De esta forma, entre sus funciones, tiene a cargo la dosimetría de pacientes en radioterapia, el control de calidad de las unidades de tratamiento y del Diagnóstico por imagen y el control de dosis de paciente sometidos a pruebas diagnósticas con radiaciones, entre otras cosas.
¿Hablamos?